Angelic Heart

Angelic Heart


    Según yo haría esta entrada conforme iba trabajando esta idea, pero me fui distrayendo poco a poco...

    Hace unos meses realicé la toma de protesta para mi titulación, para esto elaboré un platillo en base a técnicas vistos en un diplomado anterior.

    Me tomó mucho tiempo pensar algo, la verdad es que desde el inicio del diplomado me encontraba maquilando las características de lo que quería presentar, pero, con la depresión y los cambios no estaba segura de como iniciar.

    Quería presentar algo distinto, pero lo cierto es que todo en esta vida esta inventado y  el resto solo intentamos combinar y reinventar. Quería presentar algo que me representara de algún modo, pero, en medio de una crisis es difícil mostrarse cuando uno se siente perdido. Quería usar unos moldes de silicona que tenía pensados justo para esto, pero, como solo los arrumbe por mucho tiempo estos terminaron deformándose. Quería algo que fuera portátil, pero, ¿no sería mejor presentar de modo tradicional?

    Empecé por plantear los elementos importantes, durante el curso hicimos pastelería, glaseados espejo, chocolatería, cremas, mousses, panes... De esto lo que me parecía más sencillo eran los bombones de chocolate, "podría hacer algo simple y rellenarlo", pensé; de algún modo iba con la idea de algo portátil. Pero por otro lado sentía que sería muy poco para una evaluación que abarcó tanto. Entonces recordé lo vistoso eran los pasteles glaseados, además se prestaban para hacerse en pequeñas porciones, por lo que servirían para la idea de algo compacto y portátil. Para añadir algo más personal decidí añadir suspiros de merengue ya que es algo que suelo hacer seguido.


    Honestamente creí que primero lograría dar con los sabores con eso sabría que presentar o incluso que vería ingredientes y la respuesta vendría a mi, ya que usualmente eso pasa, pero esta vez no fue así, tuve que comenzar con esas cosas concretas para después descubrir los sabores, y vaya que tomo tiempo.

    Pensé en sabores orientales como hacer merengues de sakura, o un pancito de matcha con cobertura de chocolate y pistaches, incluso pensé en hacer un mousse con cerveza de frambuesa y ver como combinarlo al resto, pero entre el costo y poca disponibilidad de ingredientes tuve que ir cambiando de ideas y empecé pensando en combinaciones que me gustaran, entonces algo llego a mi.

    Durante los tiempos de Angel Maid Café (mi cafetería R.I.P.), había una combinación que me gustaba mucho pero no ofrecía en el menú, era más como un gusto culposo que ofrecía a amigos cercanos y me gustaba pensar que era parte del "menú secreto" de la cafetería. Algo que distinguía a mi café eran las combinaciones y nombres de las maleteadas, la bebida del menú secreto era mas bien un frappe pero surgió a base de esas malteadas. Durante la temporada de lichis solía cortar la pulpa de algunos muy fina, después en la licuadora ponía una medida de calpis, una de licor de ciruelas, un par de lichis enteros y un montón de hielo; lo llame Angelic Maiden en honor al café. Creo que actualmente esta mezcla es común en muchos lugares de comida japonesa, pero para mi en aquel momento era especial. Bueno pues en lugar de seguirle dando vueltas use esos sabores de base.

    Para transferirlo y usar las técnicas. Empecé con merengues de té verde, aún me quedaba un poco, no tanto para un pastel pero si para darle color y sabor a algunos suspiros. Lo segundo también sencillo fue un bombón relleno de ganache de licor de ciruelas. Y ahora si, lo más complejo. La pastelería que vimos en el diplomado constaba de pasteles de muchas capas así que opte por hace una base de biscocho de chocolate, una capa de gel de lichi, un mousse de chocolate con calpis y finalmente un glaseado espejo que se decoraría con una pieza de chocolate en forma de ala, la pieza de merengue y el bombón relleno.

    Al principio sentí que estaba yendo por algo seguro y que tal vez no arriesgaba mucho, pero, no quería seguir dándole vueltas...


    Mi sorpresa fue la respuesta de los chefs sinodales, 2 de ellas eran chefs con las que tuve varias clases y, aunque tuve algunos puntos de mejora como cuestiones del empaque o aventurarme más con las texturas, coincidieron que tanto la presentación como los sabores eran bastante de mi, el probarlo les recordó los sabores que ponía en práctica en cocina y visualmente era completamente una representación mía.

    Estaba tan estresada tratando de presentar algo muy espectacular y tan preocupada de que fuera una barda muy alta que estaba perdiendo de vista que tal vez lo que quería y representaba era suficiente.
By ShiRen

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